viernes, 27 de noviembre de 2009

Embarazo en adolescentes.






La adolescencia es la transición entre la niñez y la etapa adulta que debe formar un ser humano totalmente independiente.

En nuestra sociedad un embarazo durante la adolescencia debe ser considerado un estímulo delétereo, ya que trastornará el caminar en forma satisfactoria hacia la edad adulta.

Esto le afectará desde el pnto de vista de su desarrollo psicológico, así como el de alcanzar una madurez social adecudada, sin olvidar que también repercutirá en el aspecto biológico.

La adolescencia es la etapa comprendida entre los 10 y los 19 años de edad, por lo que entre más joven sea la mujer embarazada más complicaciones y limitaciones tendrá en sus tres etapas de desarrollo.

Las tres etapas de la adolescencia son:

Adolescencia temprana que va de los 10 a los 14 años,
Adolescencia intermedia que va hasta los 16 años,
y la adolescencia tardia hasta los 19 años.
En México existe alrededor de 22 millones de adolescentes, de los cuales la mitad son mujeres, con una tasa de fecundidas de 64.2, misma que ha disminuido en forma paulatina en los últimos años y más baja que la tasa de fecundidad en America Latina, de 7.8.
En México ocurren 400 000 nacimientos al año de madres adolescentes.
Existen complicaciones propias del embarazo en la adolescente, así como causas que las originan y que se encuentran generalmente entrelazados entre si, debido a que estos jovenes son dependientes tanto en lo económico, como en lo emocional.
Los adolescentes sufren una gran inseguridad en cuanto a su identidad, su ego se encuentra inmaduro en lo que concierne a su funcionamiento, lo que los lleva a una impulsividad no controlada.
Poseen una sensación de pérdida, la cual con frecuencia tratan de reemplazar; es también una característica de este periodo del desarrollo humano el no contar con una respuesta adecuada al estrés y al mismo timpo se sienten omnipotentes, lo que los orilla a tomar acciones de mucho riesgo.
No hay que olvidar que los adolescentes son manipuladores deliberados y tratan de enviar mensajes a los adultos, frecuentemente también tratan de ser aceptados dentro de sus familias, su entorno y su comunidad.
En ocasiones tratan de buscar otras alternativas de vida, sobre todo si no encuentran un lugar adecuado dentro de la sociedad.
La paciente adolescente embarazada es siempre una paciente especial y como tal debe ser tratada.
De ser posible debe ser manejado su embarazo por un equipo multidisciplinario (obstetra, perinatologo, psicólogo, nutriólogo, etc).

jueves, 26 de noviembre de 2009

Homeopatía para la inducción del trabajo de parto. Medicina Basada en la Evidencia




• Homeopatía para la inducción del trabajo de parto



RESUMEN EN TÉRMINOS SENCILLOS:


No hay pruebas suficientes para demostrar el efecto de la homeopatía en la inducción del trabajo de parto.
Algunas veces es necesario inducir el trabajo de parto (iniciar el trabajo de parto de manera artificial) cuando una mujer embarazada o su hijo están en riesgo.


La homeopatía incluye el uso de sustancias diluidas que en su forma no diluida, causan ciertos síntomas.


El principio es que una sustancia homeopática estimulará el organismo y las funciones curativas para alcanzar un estado de equilibrio y aliviar los síntomas.


La revisión de los ensayos encontró que no hay pruebas suficientes para demostrar el efecto de la homeopatía como método de inducción del trabajo de parto.


Se necesita investigación adicional.


RESUMEN


Antecedentes:


Ésta es una revisión de una serie de revisiones de maduración cervical e inducción del trabajo de parto que utilizaron metodología estándar.


La homeopatía implica el uso de sustancias diluidas que provocan síntomas en su forma no diluida.


Un tipo de hierba, el "caulophyllum" es un tipo de tratamiento homeopático que se ha utilizado para inducir el trabajo de parto.


Objetivos:


Determinar los efectos de la homeopatía para la maduración cervical o la inducción del trabajo de parto en el tercer trimestre.


Estrategia de búsqueda:


Registro de ensayos del Grupo Cochrane de Embarazo y Parto (Cochrane Pregnancy and Childbirth Group) (13 de mayo de 2003) y bibliografías de informes relevantes.


Criterios de selección:


Ensayos controlados aleatorios que compararon la homeopatía utilizada para la maduración cervical o la inducción del trabajo de parto en el tercer trimestre con el placebo o ningún tratamiento u otros métodos enumerados más arriba en una lista predefinida de métodos de inducción del trabajo de parto.


Recopilación y análisis de datos:


Se desarrolló una estrategia genérica para manejar el gran volumen y la complejidad de los datos de ensayos relacionados con la inducción del trabajo de parto.


Esto implicó un método de obtención de datos en dos pasos.


La obtención inicial de datos se realizó centralizadamente.


Resultados principales: Se incluyeron en la revisión dos ensayos que involucraban a 133 mujeres. Los ensayos eran controlados con placebo y a doble ciego, pero no fueron de alta calidad.


No hubo suficiente información disponible acerca del método de asignación al azar y el estudio carecía de resultados clínicamente significativos.


Los ensayos no mostraron diferencias en ningún resultado primario o secundario entre el grupo de tratamiento y de control.


Conclusiones de los revisores:


No hay pruebas suficientes como para recomendar el uso de la homeopatía como método de inducción.


Es probable que la demanda de medicina complementaria continúe y que las mujeres sigan consultando a un homeópata durante el embarazo.


Aunque el caulophyllum es un tratamiento homeopático de uso frecuente para la inducción del trabajo de parto, la estrategia de tratamiento utilizada en el único ensayo que evaluó esta hierba puede no reflejar la práctica homeopática sistemática.


Se necesitan evaluaciones rigurosas de los tratamientos homeopáticos individualizados para la inducción del trabajo de parto.


Esta revisión debería citarse como:


Smith CA. Homeopatía para la inducción del trabajo de parto (Revisión Cochrane traducida). En: La Biblioteca Cochrane Plus, número 3, 2008. Oxford, Update Software Ltd. Disponible en: http://www.update-software.com. (Traducida de The Cochrane Library, Issue . Chichester, UK: John Wiley & Sons, Ltd.).

Inmersión en agua para el embarazo, trabajo de parto y parto. Medicina Basada en la Evidencia




Inmersión en agua para el embarazo, trabajo de parto y parto

Antecedentes:

Los entusiastas de la inmersión en agua durante el trabajo de parto y parto han recomendado su uso para aumentar la relajación materna, reducir la necesidad de analgesia y promover un modelo de la atención de apoyo de partería.

La preocupación de los escépticos es que puede haber mayor daño a las mujeres o los bebés, por ejemplo, la percepción de un riesgo asociado con la inhalación neonatal de agua y la infección materna/neonatal.


Objetivos:
Evaluar la evidencia de los ensayos controlados aleatorios acerca de los efectos de la inmersión en agua durante el embarazo, el trabajo de parto o el parto en los resultados maternos, fetales, neonatales y de los cuidadores.


Estrategia de búsqueda:
Realizamos búsquedas en el Registro de Ensayos del Grupo Cochrane de Embarazo y Parto (Cochrane Pregnancy and Childbirth Group) (septiembre 2003).


Criterios de selección:

Todos los ensayos controlados aleatorios que compararon la inmersión en cualquier clase de bañera/pileta con la no inmersión durante el embarazo, trabajo de parto o parto.

Recopilación y análisis de datos:

Se evaluaron los ensayos para confirmar la elegibilidad y calidad, y se obtuvieron los datos de manera independiente.

Un revisor introdujo los datos y otro los verificó en lo que respecta a exactitud.

Resultados principales:

Se incluyeron ocho ensayos (2939 mujeres).

No se identificó ningún ensayo que evaluara la inmersión versus la no inmersión durante el embarazo, considerara los diferentes tipos de bañeras/piletas, o considerara el manejo del alumbramiento.

Hubo una reducción estadísticamente significativa del uso de analgesia/anestesia epidural/raquídea/paracervical entre las mujeres asignadas a la inmersión en agua durante el período dilatante del trabajo de parto comparado con aquellas no asignadas a la inmersión en agua [odds-ratio (OR) 0,84; intervalo de confianza del 95% (IC) 0,71 a 0,99; cuatro ensayos].

No hubo diferencia significativa alguna en los partos vaginales quirúrgicos (OR 0,83; IC del 95%: 0,66 a 1,05; seis ensayos) ni en las cesáreas (OR 1,33; IC del 95%: 0,92 a 1,91).

Las mujeres que usaron la inmersión en agua durante el período dilatante informaron un dolor estadística y significativamente menor que aquellas que no realizaron el trabajo de parto en agua (40/59 versus 55/61) (OR 0,23; IC del 95%: 0,08 a 0,63; un ensayo).

No hubo diferencia significativa alguna en la incidencia de una puntuación de Apgar menor que 7 a los cinco minutos (OR 1,59; IC del 95%: 0,63 a 4,01), ingresos a unidades neonatales (OR 1,05; IC del 95%: 0,68 a 1,61), o tasas de infección neonatal (OR 2,01; IC del 95%: 0,50 a 8,07).

Conclusiones de los revisores:

Existe evidencia de que la inmersión en agua durante el período dilatante del trabajo de parto reduce el uso de analgesia y la notificación de dolor materno, sin resultados adversos en la duración de trabajo de parto, el parto quirúrgico o los resultados neonatales.

Los efectos de la inmersión en agua durante el embarazo o en el alumbramiento son poco claros.

Un ensayo analiza el parto en el agua, pero es demasiado pequeño para determinar los resultados para las mujeres o los recién nacidos.

Esta revisión debería citarse como:

Cluett E R, Nikodem VC, McCandlish RE, Burns EE. Inmersión en agua para el embarazo, trabajo de parto y parto (Revisión Cochrane traducida). En: La Biblioteca Cochrane Plus, número 2, 2005. Oxford, Update Software Ltd. Disponible a: http://www.update-software.com. (Traducida de The Cochrane Library, 2005 Issue 2. Chichester, UK: John Wiley & Sons, Ltd.).

domingo, 22 de noviembre de 2009

Asi comienza todo...



Hermoso video de National Geographic en portuges, desde el momento de la concepción y el desarrollo subsecuente del bebé. Entendible y magnifico.

viernes, 20 de noviembre de 2009

La lactancia materna en su proceso natural.



Una característica fisiológica de todos los mamíferos, es amamantar a los pocos minutos después del nacimiento; casi todos los seres humanos hemos hecho esto por mas de dos millones de años.

Una mujer sana produce calostro desde temprano del embarazo, al nacimiento tiene suficiente para poder alimentar a su hijo, transmitirle anticuerpos y proporcionarle líquido.

Si el recién nacido es a término, clínicamente sano y con una calificación de Apgar de 7 o más y Silverman 0, puede y debe iniciar la lactancia en el pecho de su madre, dentro de las dos primeras horas después del nacimiento, mientras más pronto mejor.

De esta forma no solo se alimenta y protege, el contacto piel con piel de su madre le proporciona el calor y amor que el recien nacido necesita, sus necesidades biológicas, físicas y emocionales son satisfechas.

Es necesario que el recien nacido permanezca al lado de su madre las primeras horas después del nacimiento, el alojamiento conjunto es recomendable para lograr una lactancia exitosa y más duradera, de este modo el niño amamantará cada vez que lo necesite, a libre demanda, esto es cuando él tenga hambre, una succión frecuente es el estímulo suficiente para que se dispare el reflejo hormonal que se necesita para producir una buena cantidad de leche y disminuir el sangrado postparto, de esta manera la madre se recupera más rápido.

Es recomendable una correcta posición del niño en el pecho, para lograr una lactancia exitosa, la madre debe estar comoda y con buen soporte en la espalda, tocar con su pezón el lavio inferior del niño provoca el reflejo de busqueda, cuando el recien nacido abre la boca grande, ella debe acercarlo rápidamente para introducir en su boca lo más posible de areola, de modo que la succión sea precisamente en la areola y no en el pezón; así el niño recibe mayor cantidad de leche, no lastima el pezón y descongestiona rápidamente las mamas; la estimulación durante el proceso de succión de los nervios sensoriales de la areola originan estimulos aferentes a la glándula hipofisis y está secreta grandes cantidades de hormona prolactina y oxitocina, con el consecuente incremento en la producción de leche, la presencia de reflejos de bajada o eyección intensos y una mayor eficiencia del proceso de involución uterina.



Lactancia Materna



La Leche humana es especie-específica y todos los sustitutos o sucedáneos difieren marcadamente de ella, haciendo a la leche humana el alimento ideal para la alimentación infantil.

La lactancia materna es conveniente en forma exclusiva durante los primeros 6 meses de vida cuando menos, con el interés de prolongarla hasta el año de edad o más si es posible, así como el inicio de la ablactación con la introducción progresiva de alimentos, principalmente enriquecidos con hierro apartir del segundo semestre de vida.

Los profesionales de la salud y encargados de la atención materno infantil deben estar capacitados para promover y proteger la alimentación con leche humana a todos los niños, por los grandes beneficios que representa a corto y largo plazo tanto para el niño, como para la madre que amamanta.

Los prematuros alimentados con leche humana reciben beneficios significativos en cuanto a protección inmunológica, nutrición y desarrollo neurológico y somático, cuando son comparados con niños alimentados sólo con fórmula.

La lactancia materna disminuye la incidencia y severidad de un amplio rango de enfermedades infecciosas en el recien nacido, que por naturaleza tiene un sistema inmune poco desarrollado.

Las enfermedades que principalmente disminuyen y se previene su incidencia y obviamente la muerte infantil son meningitis bacteriana y bacteriemia, diarrea, infecciones respiratorias, enterocolitis necrosante, otitis media, infección urinaria y sepsis de inicio tardio en niños prematuros.

También se ha sugerido a la lactancia como un factor que disminuye la frecuencia del síndrome de muerte súbita infantil en el primer año de vida, reduce la incidencia de diabetes mellitus insulino-dependiente (tipo 1) y no insulino-dependiente (tipo 2); linfoma, leucemia y enfermedad de Hodgkin, obesidad, sobrepeso, hipercolesterolemia, y asma.

Los mejores resultados en las pruebas de habilidad y desarrollo cognoscitivo, los consiguen los niños amamantados.

La inteligencia tiene un fondo multifactorial, sin embargo, esta diferencia es atribuida a que el amamantamiento estrecha el vínculo entre madre e hijo y que éste ingiere en un momento crítico de su desarrollo, leche materna que contiene factores biológicos únicos.

Cuando se explora la calidad de los movimientos generales, como un indicador de la función cerebral, se muestra que los niños amamantados tienen una ventaja cuando se amamantan por seis semanas o más.

La leche materna, incluso de manera sorprendente, proporciona cierto efecto analgésico en algunos procedimientos clínicos que causas dolor en la etapa neonatal.

Los beneficios demostrados en la madre que amamanta a sus hijos son, disminución del sangrado postparto así como involución uterina más rápida, atribuido a un incremento en la concentración de oxitocina, disminución en la pérdida menstrual de hemoglobina por alargamiento del periodo intergenésico secundario a amenorrea, regreso más temprano al peso previo al embarazo, disminución del riesgo de cáncer de mama premenopáusico, así como de ovario, disminución de las fracturas de cadera y osteoporosis en el periodo postmenopáusico, entre otros grandes beneficios de tipo económico y biopsicosocial considerables.